Encontramos redes WiFi públicas en aeropuertos, hoteles, centros comerciales, parques, cafeterías, etc. Resultan atractivas para los usuarios por razones obvias: son gratuitas, de fácil acceso, ya que no requerimos de una contraseña para usarlas, y nos ahorramos los datos de nuestro teléfono. Pero esto que las hace tentadoras a los usuarios, también las hace para los ciberdelincuentes. A pesar de sus bondades, usar las redes WiFi públicas tiene sus riesgos. Lo mejor sería no usarlas, pero si no tienes otra opción, es importante que tengas conocimiento de algunos tips para proteger tu información cada que uses redes WiFi públicas.
De esto queremos hablarte en este post, de algunos consejos para que puedas usar las redes WiFi abiertas sin que te preocupes de los peligros. Pero, también queremos dejarte en claro a qué te expones cada que te conectas a ellas. Empecemos por aquí.
¿Cuáles son esos peligros de usar redes WiFi públicas?
Aunque sintamos que usar WiFi gratuitas es útil porque nos saca de un apuro, eso conlleva varios peligros que pueden comprometer nuestra seguridad en línea. Como estas redes no requieren de autenticación, son un blanco fácil para los hackers. Estos pueden acceder a los dispositivos conectados sin ningún tipo de restricciones.
El primer riesgo del que queremos hablarte es ser víctima de un ataque de «hombre en el medio» (Man-in-the-Middle). En este tipo de ataque, el hacker se posiciona entre el usuario y el servidor. Este intercepta y roba la información que se transmite, como credenciales de inicio de sesión o datos financieros. Este ataque se puede realizar mediante un router malicioso o si se han detectado vulnerabilidades en la configuración de una red legítima.
La segunda amenaza, muy común en las redes públicas, son los «sniffers«. Se tratan de herramientas que recopilan todos los datos que pasan por la red para analizarlos y buscar información sensible. Estos ataques pueden exponer contraseñas, información personal, e incluso datos de tarjetas de crédito, práctica conocida como «carding».
Por último, no podemos dejar de mencionar que las redes Wi-Fi públicas son un medio propicio para instalar de malware en los dispositivos conectados, ya que los hackers pueden acceder muy fácil y poner software malicioso que puede robar información o dañar el equipo.
¿Cómo proteger tu información al usar una red WiFi abierta?
- Desactiva la conexión automática. Ingresa a la configuración de tu teléfono y desactiva esta opción para evitar conectarte sin darte cuenta a redes inseguras.
- Siempre que puedas, accede a servicios web a través de un navegador en lugar de aplicaciones, ya que los navegadores suelen usar el protocolo HTTPS, proporcionando una capa adicional de seguridad.
- Usa una VPN (Red Privada Virtual) ya que esta crea un «túnel» seguro para tu conexión y así proteger tus datos de posibles atacantes. Elige un servicio VPN confiable, mejor si es de pago, para garantizar una mayor seguridad.
- No realices transacciones bancarias o accedas a servicios que requieran contraseñas mientras estés conectado a una red WiFi pública.
- Activa la autenticación de dos factores en todos los servicios que lo permitan. Esto añade una capa extra de seguridad, incluso si alguien logra obtener tu contraseña.
- Desactiva el WiFi de tu dispositivo cuando no lo estés utilizando para minimizar el tiempo en que está expuesto a posibles riesgos.
- Instala siempre las últimas actualizaciones de tu sistema operativo y aplicaciones, puesto que suelen incluir parches de seguridad importantes.
- Evita acceder a archivos importantes en redes WiFi públicas.