El hosting, en términos sencillos, es el servicio que permite que tu sitio web esté disponible en Internet: de la misma manera que para tener un negocio físico debes alquilar un espacio en un edificio para establecerlo, en el caso de los negocios digitales lo que alquilas es el hosting, es decir, es un servidor y un centro de datos. En este artículo te explicamos qué tipos de hosting existen y por qué un servidor VPS barato puede ser la opción ideal para tus necesidades.
¿Qué clases de hosting se pueden contratar para una web?
El hosting compartido es el más común y asequible. Aquí, tu sitio web comparte los recursos del servidor (como CPU, RAM y espacio en disco) con otros sitios. Es una opción ideal para proyectos pequeños o personales, pero su rendimiento puede verse afectado si alguno de los sitios vecinos consume demasiados recursos.
Luego está el hosting dedicado, que te da acceso exclusivo a un servidor completo. No tienes que compartir recursos con nadie, lo que se traduce en un rendimiento óptimo y una gran flexibilidad. Sin embargo, es una opción más costosa y suele requerir conocimientos técnicos avanzados para su gestión. El hosting en la nube, por su parte, es otro tipo interesante que ha ganado terreno en los últimos años. En lugar de depender de un solo servidor, tu sitio se aloja en una red de servidores conectados. Esto permite una mayor escalabilidad y redundancia, pero también puede ser más complejo de manejar y más costoso.
Si usas un gestor de contenidos específico, como WordPress o PrestaShop, hay opciones específicas. El hosting WordPress está optimizado para ofrecer el mejor rendimiento con este popular CMS e incluye configuraciones que mejoran la velocidad, la seguridad y la facilidad de uso de tu sitio web. Suele venir con WordPress preinstalado, lo que facilita mucho la creación de un nuevo sitio.
Por otro lado, si gestionas una tienda en línea, el hosting PrestaShop es una opción a considerar. Este tipo de hosting está optimizado para PrestaShop, un software de comercio electrónico muy utilizado. Cuenta con características específicas como plantillas de optimización SEO, integración con sistemas de pago y gestión de inventario. Todo esto hace que la administración de tu tienda sea mucho más sencilla y eficiente.
Por último, llegamos al VPS o Servidor Privado Virtual. Este tipo de hosting crea varias «máquinas virtuales» en un solo servidor físico. Cada máquina virtual actúa como un servidor independiente, con su propio sistema operativo y recursos dedicados. Es como tener un mini servidor dedicado dentro de un servidor más grande, lo que ofrece un equilibrio perfecto entre rendimiento, flexibilidad y costo.
¿Cuándo conviene elegir un servidor VPS?
Ahora que ya conoces los diferentes tipos de hosting, es momento de entender por qué un servidor VPS podría ser la elección perfecta para tu sitio web. A diferencia del hosting compartido, un VPS te ofrece todos los recursos en exclusiva, lo cual garantiza que nunca tengas problemas de rendimiento por posibles sobrecargas en el servidor producidas por otros usuarios.
Además, con un VPS tienes un control mucho mayor sobre tu entorno de hosting, ya que puedes instalar el sistema operativo que prefieras, configurar el servidor a tu gusto, e incluso reiniciarlo cuando sea necesario. Del mismo modo, si tu sitio web empieza a crecer y a requerir más recursos, un VPS te permite escalar fácilmente sin necesidad migrar tu sitio a otro servidor.
Por otra parte, a nivel de seguridad, un VPS también ofrece ventajas, ya que al no compartir espacio con otros sitios, reduces el riesgo de sufrir ataques o infecciones por malware provenientes de otros usuarios, y permite implementar medidas de seguridad personalizadas, como firewalls, certificados SSL y políticas de acceso específicas.
Por todo ello, el servidor VPS es ideal para sitios web con tráfico moderado a alto, proyectos en crecimiento, o negocios que necesitan mayor control, seguridad y personalización, como grandes empresas y tiendas online.
¿Qué debe ofrecer un buen proveedor de servidores VPS?
Un buen proveedor de servidores VPS debe ofrecer una serie de características esenciales que aseguren un servicio de alta calidad y adaptado a las necesidades de los usuarios. Para empezar, una garantía de 30 días es fundamental, ya que permite evaluar el servicio sin compromisos, asegurando que cumpla con tus expectativas. Además, es importante que incluya el certificado SSL gratis para proteger la información sensible de tus usuarios y mejorar la confianza en tu sitio web.
La ubicación de los servidores en España es otro aspecto clave, ya que garantiza una menor latencia y un mejor rendimiento para tu público local, así como que tenga un soporte Técnico 24×7 que ofrezca asistencia inmediata en cualquier momento para evitar que posibles fallos en la web alteren su funcionamiento.
Por otra parte, un buen servidor vps te permitirá elegir qué versión de PHP usar y con ello podrás adaptar tu entorno a las necesidades específicas de tu aplicación. Finalmente, también debe contar con sistemas de seguridad web avanzados, como herramientas para detectar código malicioso y un filtro de spam avanzado para proteger tanto tu servidor como la experiencia de tus usuarios.
