Mueve las fichas para balancear la bola de un lado a otro en Portal Drop

https://youtu.be/Sx4TnCNXGEc

Portal Drop es un juego adictivo que se basa en la simple premisa de ir quitando fichas para que vaya cayendo una bola por el efecto de la gravedad. Un juego de esos adictivos que con una base simple es capaz de conseguir que echemos una partida detrás de otra sin cesar.

No es la primera vez que encontramos este tipo de juegos, ya que Portal Drop le da una vuelta a otros al estilo en los que hemos de construir torres en vez de derruirlas como en este. La gran diferencia es que tendremos que dejar caer a la bola hacia uno de los laterales para que llegue hasta uno de los agujeros de gusano por los que se volatizará.

Lo simple es adictivo

Portal Drop se basa en una física de objetos con la que es capaz de mantener con vida a una bola que va cayendo sin cesar sobre una serie de fichas que están lo suficientemente encajadas par formar una de mayor tamaño. La bola cesará en muchos momentos su movimiento, para que eliminemos la ficha justa para que ésta caiga en el lugar debido. De esta forma iremos trazando la trayectoria necesaria para que caiga en esos agujeros de gusano.

Esto se convertirá en todo un rompecabezas, ya que hemos de decidir con rapidez cuál de las siguientes fichas hemos de eliminar. Mismamente podemos quitar algunas que se encuentren más abajo para que se produzca un efecto de balanceo, y así la bola finalmente llegue a su destino.

Una mecánica de juego sencilla, pero que es capaz de generar mucho entretenimiento por minutos para así ir haciéndonos a este juego llamado Portal Drop. Es la aleatoriedad de las partidas con el movimiento de la bola y esas fichas que también provocan deslizamientos extras, lo que engrandece a este juego que, aunque no tenga muchas descargas en la Play Store, promete.

Portal Drop, un juego que hay que probar

Que la bola tenga forma hexagonal suma más dificultad a Portal Drop. Ya que incluso las piezas que nos quitemos conseguirán «golpearla» y generar nuevos desplazamientos hasta que demos por perdida la partida. Toda esta variedad de situaciones consiguen que Portal Drop sea un juego excelente que sin muchas florituras y una serie de extras como son los distintos skins a conseguir, se convierte en todo un juego para pasar un buen rato en la piscina.

Nos gustaría que hubiera más títulos así que buscan originalidad en el planteamiento o darle una vuelta de tuerca a esas mecánicas de juego que conocemos todos de miles de juegos. Es difícil, ya que las ideas no surgen así porque así. Lo mejor es alegrarnos de poder tener nuevas ofertas de entretenimiento como la que propone Portal Drop.

Al igual que lo fue Flappy Bird, otro de los objetivos de Portal Drop es conseguir la máxima cantidad de puntos y compartamos las capturas con amigos y familiares. De esta manera podremos picarnos con ellos para ver quién es el más habilidoso a la hora de mantener a la bola viva y coleando.

Con una música electrónica que agrada

Otro de los puntos a favor de Portal Drop es su música electrónica que pone la guinda sobre el pastel que es en si el juego. Le va que ni pintado el poder tener esa música ambiental con esos bajos y esos ritmos. Aparte de que según vayamos consiguiendo más puntos, obtendremos efectos gráficos más llamativos para dejar claro de que estamos batiendo nuestros propios récords.

En la realización técnica todo va perfecto con una física de objetos bien optimizada y unos gráficos que van al estilo de lo que es en si Portal Drop. Nos gustaría que hubiera distintos fondos, la capacidad de poder cambiar todo el estilo visual, al igual que ocurre con Cubriko, la nueva oferta de entretenimiento de Ketchapp.

Portal Drop es un adictivo juego puzzle que con su física de objetos y la música electrónica es capaz de encandilarnos para que lo juguemos por días hasta que seamos los mejores y nadie sea capaz de alcanzarnos.

Opinión del editor

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