En estos días en los que estamos batiendo récords de temperaturas bajas, hay que tener en cuenta que la batería de tu móvil puede desaparecer casi en un santiamén debido a la tecnología propia de las mismas. Es decir, que como pasen los 15 grados bajo cero, cuidado si necesitáis el uso de vuestro móvil.
No seríais los primeros que cargáis el teléfono al 100% para iros de viaje con una temperatura bien baja, y cuando necesitáis usar el GPS para llegar a vuestra localización, de repente os encontráis con el teléfono apagado sin batería y sin la posibilidad de cargarlo hasta que paréis en la próxima gasolinera o estación de servicio.
¿Por qué baja tan rápido la batería?
Para que nos entendamos rápidamente, la tecnología actual de las baterías ion-litio yace en una serie de reacciones químicas para que funcionen las mismas. Son esas temperaturas bien bajas las que ralentizan o simplemente «congelan» esas reacciones.
De hecho, algunos teléfonos como los de Samsung, mismamente el Galaxy Note10+, menciona en el informe de mantenimiento, y relacionado con el tiempo de carga, que ésta funciona mejor cuando la temperatura está entre los 10 y 40 grados.
Si entramos un poco más en detalle en la química que habita en las baterías ion-litio que usamos todos en nuestros móviles, la descarga de la batería se va procediendo según los iones de litio se desplazan a trav��s de la solución desde un lado del final de la batería, lo que sería el ánodo, al otro lado de la misma y a lo que se conoce como cátodo. Cuando la batería está plenamente descargada, todos esos iones están incrustados en el ánodo.
Lo curioso de todo esto es que todavía se desconoce la razón por la que el frío actúa en detrimento de la batería. Ya en 2011 un equipo de ingenieros de batería plasmaron en Journal of The Electrochemical Society (revista especializada en el campo de la ciencia y tecnologías electroquímicas), que los mecanismos que influyen en un rendimiento bajo de este tipo de baterías son todavía desconocidos.
No cargues tu teléfono con temperaturas muy bajas o ya «helado»
Ahora bien, si nos encontramos en la tesitura explicada un poco en detalle sobre como todos esos iones ahora se encuentran en el lado de la batería al que llamamos como cátodo, ni se nos ocurra intentar cargarlo, ya que el proceso de carga podría fallar de forma inesperada.
Aquí lo que hemos de hacer es tener un poco de paciencia y llevar al teléfono a algún lugar o establecimiento donde tengamos temperaturas menos bajas. De forma mágica, la batería de nuestro móvil volvería a su estado natural teniendo el mismo porcentaje de carga.
Stephen J. Harris, químico del Lawrence Berkeley National Laboratory, bajo condiciones normales de temperatura, al aplicar una corriente eléctrica o carga a la batería «transportarían» los iones de vuelta a los poros en el grafito del ánodo. Pero cuando la batería está digamos «congelada», esos iones no son capaces de introducirse en el grafito y salen de la solución para cubrir la superficie del grafito como litio sólido.
Ahora, sí intentamos cargar el móvil en ese mismo instante, con la batería «congelada», el proceso podría arruinar el rendimiento y la vida de la batería.
Es decir, y para entendernos más fácilmente, cuando la batería de nuestro teléfono vuelve a una temperatura normal, los «iones» volverán a su sitio y el porcentaje de carga vuelve a su estado.
Así que si has de necesitar tu móvil para moverte por esa ruta que quieres recorrer con todos esos paisajes nevados, y lo necesitas para poder posicionarte, piénsatelo dos veces; sobre todo si andas en zonas que pasen de los 15 grados centígrados bajo cero; no te pierdas este tutorial de cómo limpiar tu móvil.
