Diferencia entre revisiones de «Anexo:Historia del Club Atlético Independiente»

Independiente es un club deportivo, atlético y social de la República Argentina, fundado el 1 de enero de 1905. Su actividad más destacada es el fútbol, donde logró trascender nacional e internacionalmente. Es considerado uno de los cinco grandes del fútbol argentino.

En 1904, en el cruce de la Avenida de Mayo con Perú y Victoria de la Capital Federal argentina, los empleados de "A la ciudad de Londres", una de las tiendas de mejor marca de la ciudad,^[1]​^[2]​ habían formado un club llamado Maipo-Banfield Football Club, que competía en torneos de firmas comerciales y torneos relámpagos. Los empleados menores de edad del incipiente club Maipo-Banfield pagaban su cuota social de 50 centavos mensuales, como el resto de sus compañeros, pero solo les daban el derecho a presenciar los encuentros, no a participar de ellos. Esta situación provocó que los jóvenes excluidos se reunieran en un bar cerca de dicha tienda, en la esquina de Bolívar y Victoria (hoy Hipólito Yrigoyen), casualmente justo enfrente de la Plaza de Mayo^[3]​ y a una cuadra de la tienda el 4 de agosto, con el fin de tomar una decisión que los haga respetar. El líder de los disconformes era Rosendo Degiorgi, un joven empleado que trabajaba de zapatero en la tienda. Ante su propuesta, todos los allí presentes estuvieron de acuerdo.

Dos clubes de fútbol, entre ellos Atlanta (el actual equipo de Villa Crespo) se ofrecieron para darle lugar a los jugadores, pero estos prefirieron mantener sus ideales, y después de largas deliberaciones, decidieron independizarse del Maipo-Banfield. Rosendo Degiorgi exclamó "¡Qué Atlanta ni ocho cuartos! ¡Nosotros tenemos que tener un club independiente!". Es entonces cuando surgió el nombre del club. "Ahí está el nombre. ¡Independiente! Nos llamaremos Independiente" aclamó.

El propio Rosendo Degiorgi fue nombrado presidente provisorio, cuya familia facilitó una pequeña habitación en su casa de la calle Montevideo al 1585 (en el actual Barrio Norte del barrio de Recoleta, justo enfrente de la actual Plaza Vicente López y Planes). Esta sería considerada como la primera sede del nuevo club. Allí se deliberó más tarde que hubiera una nueva asamblea para oficializar la fundación, convocando a todos los miembros del club, ya que el acta de compromiso del 4 de agosto de 1904 no fue conservada, y no se hallaron registros escritos de su existencia. La cita era el 1 de enero de 1905, pero no se pudo realizar plenamente por falta de quórum. Los integrantes del naciente club eran en su mayoría jóvenes, y los festejos del Año Nuevo impidió a algunos de ellos llegar en un estado presentable. Igualmente, los que sí concurrieron, establecieron ese momento como la de la fundación oficial, y designaron a los inscriptos hasta esa fecha como socios fundadores. Se tomó entonces el 1 de enero de 1905 como fecha oficial de fundación del club. Más tarde, el 25 de marzo de 1905, se designaron los miembros del club en sus cargos directivos, y fue así que Arístides Langone fue elegido presidente del club.

Aunque no tenían aún ni lo mínimo indispensable para el funcionamiento de la institución, comenzaron a buscar nuevos adeptos y futbolistas. Los primeros futbolistas y socios del club fueron familiares y amigos de los fundadores que hicieron un esfuerzo por hacerlo crecer, como: Manuel Pardiñas, Cristóbal García, Carlos y Ernesto Degiorgi (los hermanos de Rosendo), Manuel Martín, Severo Rodríguez, Alberto Ferrier, Arístides, Alfredo y Edelmiro Langone (Arístides Langone sería el primer presidente del club elegido por voto), Francisco Marystani y Juan Darnay. Se supo que los socios pagaban 25 centavos como cuota mensual, y el doble las personas que ocuparan cargos directivos, utilizando los fondos recaudados para la compra de una pelota de cuero (que por entonces costaba $8,50) y un sello de actas (que a su vez valía $1,50), costando entonces un total de $10. Pudieron juntar el dinero y pagar la cantidad necesaria, a pesar de que según todos los registros de la época, esta cantidad de dinero era considerada muy grande en la Argentina en aquellos tiempos. Más tarde comenzaron a utilizar los fondos para la confección de la vestimenta deportiva, la cual en sus comienzos consistía, entre otras cosas, en una camiseta blanca por de bajo costo, donde colocaron el primer escudo del club, que se cree que es una imitación del escudo del Saint Andrew's Scots School (que a su vez se asemeja a la bandera de Escocia), donde cada triángulo poseía una de las siglas del Independiente Foot-Ball Club. En 1909, se decidió que todos los socios pagaran la misma cantidad de dinero, sin importar el cargo o la posición que tuvieran en el club.

Tuvieron su primer campo de deportes en un terreno de las calles Donato Álvarez y Gaona, hoy ocupado por la Plaza Irlanda, en el barrio de Caballito. Allí jugaron su primer partido, el 19 de enero de 1905 contra Atlanta, empatando 2-2, comenzando una larga historia deportiva. El primer triunfo, por 1-0, lo consiguió, justamente, frente a Maipo-Banfield, el club del que se habían independizado, el 26 de enero de 1905.^[4]​^[5]​

En 1905 la Escuela del Oeste le cedió al Independiente Foot-Ball Club un terreno de 100 por 120 metros situado en Avenida Alvear (actual Av. del Libertador) y Tagle (entre los barrios de Palermo y Recoleta), donde construyeron su nuevo campo deportivo. Sin embargo, este fue rechazado por los inspectores deportivos de la AFA de la época por falta de pasto. Este espacio fue utilizado por River Plate más tarde. En 1906 cruzaron el Riachuelo para salir de capital e instalarse en Barracas al Sur, hoy Partido de Avellaneda, en la calle Manuel Ocampo al 600 del barrio de La Crucecita.

Después de haber hecho de local en varios terrenos de distintos barrios de Buenos Aires, en 1907 los directivos consiguieron un terreno disponible en Avellaneda. Así es como el club cruzó el Riachuelo y se instaló en la ciudad al sur de Buenos Aires, lugar del cual nunca volvió a trasladarse.

En el nuevo campo en Avellaneda se organizó contra el Bristol Football Club, equipo uruguayo, un partido memorable ya que se trató del primer enfrentamiento internacional del club, en conmemoración por la inauguración de la nueva tribuna del estadio, y por dos grandes renovaciones del club; el club reformó su nombre como "Club Atlético Independiente" y vistió por primera vez su actual camiseta roja, por iniciativa del presidente Arístides Langone, que se inspiró en el Nottingam Forest inglés. Este club se encontraba de gira en Buenos Aires, en la cual se enfrentó al Alumni argentino y lo goleó por 6-0. Langone quedó sorprendido ya que Alumni era el mejor equipo local de aquel entonces, y se decidió a copiar la estética del club inglés.^[6]​

El club, que todavía era un humilde club de barrio, fue autorizado en 1906 para jugar en la segunda y tercera división de la liga argentina de fútbol. Su primera participación fue para el olvido, ya que solo ganó 3 partidos de 18, y el equipo de la tercera era muy débil, perdiendo por goleada sus dos últimos partidos, uno de ellos drásticamente por 21-1 contra Atlanta. Según los hinchas este hecho ocurrió debido a que el arquero titular, el presidente Arístides Langone, se había enfermado de gravedad, y fue reemplazado por un vecino que nunca había jugado al fútbol.

En 1908 realizó un buen papel en los torneos que disputó, llegando a jugar su primera final contra Ferro Carril Oeste en Palermo por la Copa Competencia El Diario, perdiendo por 3-0.

En 1909 el equipo ganó la Copa Adolfo Bullrich,^[7]​ siendo este el primer título oficial de su historia, luego de vencer en octavos de final al GEBA, en cuartos de final a Ferro Carril Oeste, en semifinales a Estudiantil Porteño ganándole en tiempo suplementario por 3-2, (goles de Miguel Larralde, Arnulfo Leal y uno en contra), y en la final a San Isidro. El equipo titular a lo largo de la competencia que ganó el primer título fue; José Buruca Laforia, Balbino Ochoa, Manuel Deluchi, Carlos Moretti, Roberto Scala, Ernesto Sande, Alberto Tallent, Juan Collazo, Arnulfo Leal, Miguel Larralde y Francisco Viegas.^[8]​^[6]​

En 1911, Independiente fue uno de los clubes fundadores de la FAF, con el objetivo de poner en juego un nuevo campeonato de Primera División, a raíz de un conflicto entre la AAF y un conjunto de equipos. Así es como llegó a disputar torneo de Primera División 1912 de la FAF, siendo esta su primera experiencia como equipo de Primera.

Su primer partido oficial de Primera División fue una victoria por 3-0 ante Kimberley, en Avellaneda. Igualó en la primera posición con Porteño, con quién disputó y perdió el desempate por el título de una forma muy polémica; en aquel partido que se encontraba empatado 1-1, Independiente marcó un gol en los últimos minutos que lo consagraba campeón, que fue anulado maliciosamente por el árbitro, lo que motivó fuertes protestas de los jugadores, que culminó con la expulsión de tres. Independiente se retiró del campo de juego y la Federación dispuso que el partido se repita al día siguiente, al cual Independiente no se presentó, y derivó en la consagración como campeón a Porteño. El goleador de este torneo había sido Ernesto Colla, de Independiente.

En 1914 el club obtuvo su segundo trofeo, la Copa Competencia «La Nación», venciendo sucesivamente al Lanús United, All Boys y a Kimberley en semifinales, alzó su segundo trofeo desde su fundación. La final nunca se disputó porque Argentino de Quilmes se desafilió de la FAF (por motivos desconocidos) antes del partido e Independiente fue declarado ganador. Este es el primer título mayor, ya que la Copa Bullrich (que ganó en 1909) era un torneo de clubes de ascenso.

En 1916 alcanzó las finales de la Copa de Honor y la Copa de Competencia «Jockey Club». En ambas finales fue vencido por Rosario Central, respectivamente por 1-0 y 2-1. En la Copa de Honor se enfrentó y ganó en primera fase al Belgrano Athletic, equipo histórico de los orígenes del fútbol argentino en el siglo XIX. Su encuentro ante Independiente fue el último de su historia.

En 1917 se consagró ganador de la Copa de Competencia Jockey Club dejando en el camino a Racing Club, Ferro, Club Columbian, San Lorenzo y en la final a Estudiantes de La Plata. Gracias a este título, el tercero en su historia, clasificó a disputar su primera copa internacional; la Cup Tie Competition de 1917 contra Montevideo Wanderers, el campeón uruguayo. El partido, que se disputó en primera instancia en el viejo estadio de Racing, fue suspendido y se reanudó en el Estadio de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, cayendo por 4-0.

En 1918 obtuvo por segunda vez la Copa de Honor; venciendo en 16avos de final al Club Columbian, en otro clásico de Avellaneda contra Racing Club por 2-1, en cuartos contra Boca Juniors por 2-1, en semifinales por 3-1 contra Newell's Old Boys, y la final por 1-0 contra Platense con un gol de Gualberto Galeano.^[9]​ Como ganador de esta jugó la Copa de Honor Cousenier contra Peñarol. Su segunda final internacional terminó igual que el año anterior; derrota por 4-0, esta vez en el Estadio Parque Pereira, siendo este el primer partido oficial en otro país.

Los buenos resultados en la liga, tras la frustración de 1912, llegaron en los años 1920. En el torneo de 1921, después de estar siete años navegando entre la mitad y los últimos puestos de la tabla, alcanzó el tercer puesto. El torneo de Primera División 1922 quedó en la historia de la institución como el primer campeonato de liga que obtuvo Independiente; alcanzó el primer puesto con cuatro puntos de ventaja con respecto al segundo, que fue River Plate. Contó un ataque demoledor que sumó 97 goles, casi el doble de lo que había logrado el segundo. Manuel Seoane, con 55 goles, fue el goleador del campeonato y conserva hasta la actualidad los récords de más goles en un campeonato de Primera División, y el de mayor goleador del amateurismo del fútbol argentino. Otros destacados fueron Zoilo Canavery, Alberto Lalín y Raimundo Orsi.

En 1923 el club Third Lanark proveniente de Escocia realizó una gira en Argentina y se enfrentó a Independiente, siendo este el primer duelo del Rojo contra un equipo europeo. El duelo lo ganó Independiente por 3-1.

Entre 1924 y 1926 se consagró campeón de tres ediciones consecutivas de la Copa Competencia de Primera División. En 1924 venció en la final al Club Almagro por 2-0,^[10]​ en 1925 a Sportivo Palermo por 2-0 en la cancha de River,^[11]​ y en 1926 a Lanús.^[12]​ La copa de 1926 vino acompañada de su segundo campeonato de liga, superando por apenas un punto al ubicado en segunda posición San Lorenzo. El equipo que ganó este campeonato fue el que produjo el surgimiento del apodo de los “Diablos Rojos”; este mote surgió del periodista Hugo Marini, del diario Crítica. La delantera letal que tenía el equipo, compuesta por Manuel Seoane, Luis Ravaschino, Zoilo Canavery, Alberto Lalín y Raimundo Orsi tenía un juego "endiablado", con gran poder ofensivo y un alto vértigo en ataque. A los hinchas del club les gustó el apodo y lo adoptaron.

Raimundo Orsi, jugador de Independiente, ganó la medalla plateada en los Juegos Olímpicos de 1928 representando a la Argentina. Con ella alcanzó la final y fue subcampeón ante Uruguay. En el torneo le marcó dos goles a Estados Unidos y uno a Bélgica. Hoy en día, es el único futbolista que obtuvo una medalla olímpica siendo jugador de Independiente.

En 1928, el club, que se hallaba sin estadio fijo porque el que utilizaba desde su traslado a Avellaneda quedó destruido por un incendio, construyó un nuevo estadio sobre un terreno ubicado cerca de las vías del tren, que se hallaba largamente inutilizable por un pantano. Las personas que trabajaron para la construcción del estadio tuvieron que tirar incontables de carros cargados de tierra, gravilla y arena para rellenar el lugar y taparlo. Se levantó allí el Estadio de Almirante Cordero más tarde conocido como "La Doble Visera". Fue el segundo estadio de cemento del mundo, tras el Harvard Stadium estadounidense.

El 4 de marzo de 1928 se inauguró el estadio en un empate por 2-2 ante Peñarol, el equipo uruguayo. El 11 de agosto recibieron allí al Fútbol Club Barcelona de España, campeones de su liga local, y los de Avellaneda se quedaron con la victoria por 4-1. Canavery, Seoane (dos veces) y Orsi marcaron los goles para Independiente.^[13]​

En 1931 el fútbol argentino pasó a ser profesional, e Independiente se adaptó sin inconvenientes a este cambio. Finalizó en la segunda ubicación de los campeonatos de 1932, 1934, 1935 y 1937, siempre quedándose a un paso de gritar campeón.^[14]​

En 1934 debutó en Primera División con 19 años el juvenil Arsenio Erico, que había llegado al club desde Paraguay dos años antes siendo menor de edad para evitar ser llamado a combatir en la Guerra del Chaco con su país. Con su llegada y la de Juan Zorrilla, más Antonio Sastre, los Rojos alcanzaron un poder ofensivo renovado que fue protagonista en estos torneos.

En 1936 el equipo se consagró campeón de la Copa de Oro Rioplatense, el primer trofeo internacional del club. En ella participaron los equipos más importantes de Argentina y Uruguay. En esos tiempos Independiente ya era considerado uno de los equipos grandes del país, lo cual fue reconocido por la AFA en 1937, cuando le otorgó a Independiente el poder de "voto proporcional" junto a Boca Juniors, Racing Club, River Plate y San Lorenzo, los otro cuatro grandes.

En 1937 arribaron al club dos goleadores más; Vicente de la Mata y Emilio Reuben, que completaron una de las delanteras más explosivas de todos los tiempos; entre 1937 y 1939 marcaron 323 goles tomando en cuenta sólo el campeonato, convirtiéndose en la delantera más goleadora del fútbol argentino. Erico fue goleador del torneo de Primera División 1937 con 47 goles y posee el récord de más goles en un campeonato del profesionalismo (el récord global, como se menciona antes, también le pertenece a Independiente y lo logró Manuel Seoane con 55 goles en 1922).

Independiente gritó campeón en el profesionalismo en 1938, totalizando 115 goles en 32 partidos (3 goles y medio por partido), la cifra más alta de goles en un campeonato argentino. El goleador fue Erico, con 43 goles en esos 32 partidos. Así, el Rojo era campeón por primera vez en la etapa profesional del fútbol argentino. En 1939 el ataque fue reforzado con Juan Maril, y los Diablos Rojos lograron el bicampeonato, marcando 103 goles en 34 juegos. Erico volvió a consagrarse goleador del torneo con 40 goles. Esto significó para el paraguayo un récord más: convertirse en el único en resultar goleador de tres campeonatos consecutivos. El poder de Independiente no se basaba únicamente en su ataque; tanto en 1938 como en 1939 contó con la defensa menos goleada de los campeonatos. En este rubro el referente era el arquero Fernando Bello, que por mucho tiempo fue también el arquero titular de la Selección Argentina.

Estos dos campeonatos vinieron acompañados de tres copas argentinas; dos veces la Copa Dr. Carlos Ibarguren y Copa Adrián C. Escobar en 1939. Venció en las finales a Rosario Central por 5-3, Central Córdoba de Rosario por 5-0, y a River Plate por 2-0. Las tres finales se disputaron en el viejo Estadio El Gasómetro de San Lorenzo.

Siendo el campeón argentino, Independiente jugó la Copa Dr. Ricardo Aldao contra los campeones de Uruguay. En 1938 se midieron ante el poderoso Peñarol, los Diablos Rojos resultaron victoriosos por 3-1 ante los manyas en el mítico Estadio Centenario de Montevideo, escenario de la final de la Copa Mundial 1930. De la Mata, Zorrilla, y Érico fueron los goleadores de la segunda copa internacional. En 1939 se midieron contra el otro grande del fútbol uruguayo, Nacional, y esta vez los rojos vencieron por 5-0 en estadio de San Lorenzo.

Los inicios de los años 1940 incluyeron muchas victorias abultadas, como el 8-1 contra Estudiantes de La Plata, un 5-0 a Vélez Sarsfield, y dos aún más destacadas; un 7-1 a Boca Juniors (siendo ésta la mayor goleada sufrida por los xeneizes en su historia), y un 7-0 sobre Racing Club, la mayor goleada histórica del Clásico de Avellaneda.

En el torneo de Primera División 1942 finalizó en la 9.ª posición y por primera vez en el profesionalismo tuvo una diferencia de gol negativa, cerrando la peor campaña hasta el momento. En 1946 se fue Arsenio Erico a Nacional de Paraguay, su club de origen. El "paraguayo de oro" se fue del Rojo habiéndose convertido en el mayor goleador de histórico de Independiente y del fútbol argentino con 295 goles. En homenaje, el estadio de Nacional fue renombrado a Estadio Arsenio Erico.

En 1948 el club realizó su primera gira internacional fuera de Sudamérica, incursionándose en México para enfrentarse a rivales como Atlante, León y las Chivas de Guadalajara.^[15]​ Anteriormente, ya había pateado pelota en Brasil, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay.

Independiente vuelve a coronarse campeón ocho años después, en 1948. En este campeonato estuvo bajo la conducción técnica de Fernando Bello, arquero campeón en 1938 y 1939. Comenzó el torneo ganándole rotundamente a Rosario Central por 10-2. Más tarde en la fecha 25°, llegando a las fechas finales del torneo, le ganó de una forma considerada "batacazo" a River Plate ya que al finalizar el primer tiempo estaba perdiendo 3-1, pero en el segundo tiempo logró dar vuelta el marcador ganando 4-3. Tras esta fecha ocurrió una huelga de futbolistas, que derivó en una polémica decisión de la AFA que decidió que en los cinco últimos partidos se jugara con jugadores amateurs. De igual manera, el Rojo obtuvo el campeonato dos fechas antes del final, tras ganarle 1-0 a Racing Club. Vicente de la Mata había permanecido en el equipo ya que no se había adherido a la huelga.

En 1949 volvió a igualar su peor campaña finalizando en la novena posición. Vicente de la Mata, un ídolo del club, parte de la famosa delantera de los años 1930, se retiró en 1950. Es entonces cuando se forma otra gran ofensiva en el equipo rojo: compuesta por Rodolfo Micheli, Carlos Cecconato, Carlos Lacasia, Ernesto Grillo y Osvaldo Cruz, todos titulares de la Selección Argentina. Futbolísticamente, la página oficial del club explicó que entre esos delanteros, Micheli fue el oportunismo; Cecconato, el motor; Lacasia fue el cerebro; Grillo, habilidad y fuerza; y Cruz, la velocidad.

Entre 1953 y 1954 el renovado equipo realizó su primera gira por Europa. En la misma, para sorpresa del mundo, debutó venciendo por 6-0 al Real Madrid en el Estadio Santiago Bernabéu, equipo que contó con Alfredo Di Stéfano en sus filas. La gira también incluyó victorias por 3-0 ante el Valencia, 5-3 sobre el Atlético de Madrid, 2-1 sobre Benfica, 8-1 sobre Sporting de Portugal, 2-1 ante el Celta de Vigo y otros partidos en Francia, Bélgica, Holanda y Gran Bretaña.^[16]​

En su regreso a Argentina alcanza la segunda posición del torneo de Primera División de ese año, teniendo el mejor ataque del campeonato con 61 goles. El enfrentamiento de ese año ante Boca Juniors estableció el récord de entradas vendidas en un partido, con 62.000 hinchas presenciando aquel encuentro que Independiente ganó por 3-1.^[17]​

En 1960 fue campeón del torneo argentino después de doce años. El título le dio pase para disputar por primera vez una copa de envergadura continental; la Copa de Campeones de América 1961. En la misma solamente disputó dos partidos quedando eliminado en cuartos de final tras caer las dos veces con el Palmeiras brasileño.

En 1963 volvió a ganar el campeonato de Primera División tras vencer en la última fecha por 9-1 a San Lorenzo, siendo esta la mayor goleada entre dos equipos grandes del país. Gran parte del campeonato se lo debe a Mario Rodríguez Varela, quien anotó 16 goles. Con este título clasificó a la Copa de Campeones de América 1964.

Para iniciar la temporada Independiente disputó en Avellaneda un juego contra el Santos brasileño, en conmemoración por la inauguración de los paneles de luz del estadio La Doble Visera. Este es un partido memorable de Independiente ya que ganó por 5-1 ante el mejor equipo del mundo, bicampeón de América y la Copa Intercontinental, que contó con jugadores como Pelé y Coutinho. Los goles rojos fueron marcados por Raúl Savoy, Raúl Bernao, Luis Suárez (dos veces) y uno en propia puerta, mientras que Jorge Maldonado logró contener a Pelé.^[18]​

En la Copa de Campeones (hoy Copa Libertadores) Independiente demostró un juego muy contundente; en primera fase compartió grupo con Millonarios de Colombia y Alianza Lima, a quienes goleó de local por 5-1 y 4-0 respectivamente. En semifinales enfrentó a un formidable rival; el Santos brasileño, ganador de las dos últimas ediciones. Algunos jugadores del equipo paulista formaron parte del plantel de Brasil campeón del último Mundial. Independiente le ganó los dos partidos, primero por 3-2 en Brasil y luego 2-1 como local. Pelé, que era uno de los rivales, estaba lesionado y no jugó los partidos.

La final la disputó ante Nacional, con quien empató sin goles en la ida y para salir campeón en casa ante 80.000 espectadores con un gol de Mario en el primer tiempo, con el que consagró a Independiente como primer campeón invicto, primer campeón argentino de América y a sí mismo como goleador del torneo, con 6 goles.

Con el primer título de campeón de América en sus manos, Independiente accedió a disputar por primera vez la Copa Intercontinental, que definía al mejor equipo del mundo contra el campeón de Europa. Así pues, jugó la serie mundial contra el Inter de Milán, que venía de ser el campeón invicto de Europa venciendo al Real Madrid en la final. La serie arrancó en Avellaneda donde los "Diablos Rojos" triunfaron por 1-0 con un gol de Mario. En el Estadio Giuseppe Meazza, cayó por 2-0 forzando un partido desempate que se disputó en el mítico Estadio Santiago Bernabeu de Madrid. Aquel partido se fue al tiempo suplementario sin goles, donde el Inter metió el gol de la victoria por medio de Mario Corso en el minuto 110, dejando sin copa más importante a Independiente.^[19]​

Como campeón defensor, Independiente clasificó directamente a las semifinales de la ahora llamada Copa Libertadores de América en 1965. En esa instancia se cruzó con un clásico rival; Boca Juniors. En esta disputa con los de "azul y oro" ganó 2-0 en la ida, y luego perdió 1-0 en el Estadio Alberto J. Armando. Dado que se jugaba por puntos, hubo un partido desempate en el Estadio Monumental para determinar al finalista, que finalizó empatado 0-0. Quien pasó a la final fue Independiente por haber marcado más goles en los partidos previos.

El otro finalista fue Peñarol, que llegó tras dejar afuera en semifinales al Santos y a su jugador estrella Pelé. Independiente comenzó ganando la final de ida con un gol tardío de Raúl Bernao, y en la vuelta cayó 3-1. Se jugó el partido de desempate en el Estadio Nacional de Chile donde Independiente goleó por 4-1; goles de Bernao, Roque Avallay, Osvaldo Mura y un gol en contra, obteniendo su segunda Copa Libertadores.

Como preparación para la Copa Intercontinental, el Rojo igualó en 1-1 dos amistosos contra el Real Madrid español y el Napoli italiano en el Giants Stadium de Nueva York,^[20]​ y una victoria por 1-0 ante el mismo equipo italiano en el CNE Stadium de Toronto, Canadá, por la Consular Cup. Esta fue la primera incursión de Independiente en América del Norte.^[21]​

En la Intercontinental, esta vez, arrancó en Italia. Por segunda vez en el Estadio Giuseppe Meazza, el "Nerazzuri" goleó a Independiente por 3-0 ante 75.000 espectadores, poniéndose en ventaja a los 3 minutos de empezado el partido. Los goles fueron de Joaquín Peiró y dos de Sandro Mazzola, delantero de la selección italiana. Para el partido de revancha en Avellaneda, con 80.000 hinchas rojos, Independiente debió haber triunfado por lo menos por un gol para ir a un partido desempate, dado que se jugaba por puntos. El partido terminó 0-0 y el Inter fue bicampeón de la copa en cancha del Rojo.^[22]​

En 1969, fuera del ámbito deportivo, Independiente estuvo implicado en un hecho histórico, y es que el dirigente Héctor Rodríguez decidió nombrar como "socios honorarios" del club a los tres tripulantes de la misión espacial Apolo 11; Neil Armstrong, Buzz Aldrin y Michael Collins. La Embajada de los Estados Unidos le facilitó las fotos de los carnets de socio al club, y este se los envió a los astronautas junto con banderines y uniformes del club para sus hijos. Armstrong reconoció este hecho en una gira por Buenos Aires en noviembre de ese año, agradeciendo al club por el gesto y contando además que, por cábala, llevó un banderín de Independiente en su viaje a la Luna y lo dejó allí arriba, entre otras pertenencias.^[23]​^[24]​

En medio de su época dorada, caracterizada por sus títulos internacionales, Independiente fue campeón de Primera en 1967, 1970 y 1971. En el torneo de 1970 tras vencer como visitante a Racing Club por 3-2, en un partido donde estaba obligado a ganar para no quedar segundo. Los goleadores fueron Aníbal Tarabini con 14 goles y Héctor Yazalde con 12. En 1971 repitió el título luego de ganarle a Gimnasia La Plata por 2-0 mientras Vélez Sarsfield perdía en su propia cancha luego de ser puntero casi todo el campeonato, sellando así la clasificación a la Copa Libertadores 1972. En la segunda fecha del torneo le propinó una abultada goleada por 11-1 a Platense, siendo ésta la mayor goleada histórica del Rojo y a la vez la peor derrota del "Calamar". Independiente contó con la defensa menos goleada del certamen.

Superó la primera fase de la Copa Libertadores 1972 tras ganar el grupo que conformaba junto a Rosario Central, y los equipos colombianos Independiente Santa Fe y Atlético Nacional. Avanzó a segunda fase junto al São Paulo de Brasil y Barcelona Sporting Club en el grupo 2. Superó en la última fecha a São Paulo en Avellaneda por 2-0 con lo cual alcanzó la final, para enfrentarse al Club Universitario de Deportes. Luego empatar sin goles en Lima fue campeón de América por tercera vez luego de vencer a los peruanos por 2-1 en casa con dos goles de Eduardo Maglioni.

La Copa Intercontinental 1972, de entrada, parecía complicada ya que tuvo en frente al Ajax de Ámsterdam holandés, la base de la "Naranja Mecánica" que más tarde fue finalista de los Mundiales de 1974 y 1978. La serie comenzó en Avellaneda culminando en 1-1, donde los holandeses ya se habían puesto en ventaja en el minuto 5 con un gol de su estrella Johan Cruyff, y casi sobre la hora llegó el empate rojo por medio de Francisco Sá. Posteriormente, en el Estadio Olímpico de Ámsterdam, ante 60.000 hinchas locales, Independiente cayó por 3-0 con goles de Johan Neeskens y dos de Johnny Rep.^[25]​

Independiente estaba entre los equipos más respetados del mundo, y como tal era invitado a realizar giras en Europa, incursionando por Yugoslavia y España en 1970^[26]​ y por Holanda, Turquía, Grecia, Italia e Israel en 1972, enfrentando a los equipos grandes de esos países.^[27]​

En la Copa Libertadores 1973 comenzó a competir a partir de la segunda fase. En dicha instancia integró el grupo 1 junto San Lorenzo y Millonarios. Hacia la última fecha Independiente estaba obligado a ganar para avanzar a la final, y así lo hizo, superando por la mínima al "Cuervo" con un gol de Miguel Giachello. El rival en la final fue el Colo-Colo de Chile. Tanto los partidos de ida como vuelta resultaron en empate, 1-1 y 0-0 respectivamente. La final, según cuentan testimonios chilenos, merecía ser ganada por los Colo-Colo, ya que Independiente anotó su gol cometiéndole falta al arquero chileno, y siendo beneficiado con un gol anulado al "Cacique" chileno. En el partido desempate jugado en el Estadio Centenario resultaron victoriosos los Diablos Rojos por 2-1 con un gol de Giachello en el tiempo suplementario, coronándose campeón de América por cuarta vez en su historia y es aquí donde se convierte en el máximo ganador de la Copa Libertadores, récord que sostiene aún hoy.

En el mismo año jugó por primera vez la Copa Interamericana, midiéndose ante el campeón de la Concacaf, el Club Deportivo Olimpia de Honduras. En la ida jugada en el Estadio Francisco Morazán ganó el Rojo por 2-1 con goles de Alejandro Semenewicz y Eduardo Maglioni, mientras que definiendo en el Estadio Nacional de Tegucigalpa levantó el trofeo luego de superar a los hondureños por 2-0, habiendo marcado nuevamente Maglioni en el primer minuto y luego Agustín Balbuena casi sobre el cierre del partido.

La cuarta oportunidad de Independiente para ser campeón del mundo fue en la Copa Intercontinental 1973. Esta vez el rival fue la Juventus italiana, equipo que reclamó que la final sea disputada a partido único en el Estadio Olímpico de Roma debido a la violencia ejercida por los clubes sudamericanos en territorio sudamericano. El club italiano tuvo un claro dominio del partido, pegando dos tiros en los palos y errando un penal. La suerte estuvo del lado de Independiente, que venció 1-0 a la Juve con un gol de Ricardo Bochini, juvenil de 19 años, a 10 minutos del final, siendo esta una de las pocas chances de gol del equipo rojo en el partido. Así es como Independiente fue campeón del mundo por primera vez en su historia. Hay que mencionar que el campeón europeo había sido el Ajax, pero en esta ocasión los holandeses rechazaron jugar la copa y en su lugar entró la "Vecchia Signora", el equipo subcampeón.

En el receso por invierno de la Libertadores 1974, Independiente le ganó por 1-0 al Inter de Milán en el Estadio Azteca, por el Trofeo Azteca de Oro, con un gol convertido por Rubén Galván. Por el mismo torneo, entre otros partidos, también igualó con el América de México en 1-1.^[28]​

Entrando en segunda fase de la Copa Libertadores 1974 como campeón defensor, Independiente protagonizó el grupo 1 junto a Peñarol y Huracán. Sin mayores complicaciones el Rojo superó el grupo y avanzó a la final para enfrentarse al São Paulo. Durante la ida en el Estadio Pacaembú, comenzó ganando Independiente al minuto 25 con un gol de Hugo Saggioratto, pero con el correr del encuentro los brasileños dieron vuelta el resultado con goles de Rocha y Mirandinha. Cuatro días después, en el Estadio Doble Visera, ganó el Rojo por 2-0 a través de los goles de Bochini en el primer tiempo y Agustín Balbuena en el segundo. Igualados en puntos, los clubes jugaron la revancha en el Estadio Nacional de Chile, donde los "Diablos Rojos" triunfaron por 1-0 con un gol del uruguayo Ricardo Pavoni de penal en el primer tiempo. Independiente se convirtió así en campeón de América por quinta vez. Aquí igualó el récord de Estudiantes de La Plata como los únicos en ganar el trofeo tres años seguidos.

Ganó nuevamente la Interamericana, esta vez contra el Deportivo Municipal de Guatemala. Ambos partidos se jugaron en el Estadio Mateo Flores centroamericano, ya que para los "Escarlatas" resultaba costoso viajar a Argentina. El Rojo debió recurrir a la definición por penales para ganar el trofeo, ya que ambos partidos resultaron en victoria por 1-0 para cada uno, siendo Bochini el autor del gol de Independiente. Es en este año, 1973, cuando Independiente pasa a ser conocido popularmente como el "Rey de Copas", por su admirable palmarés de títulos internacionales.

Se jugó la Copa Intercontinental 1974 habiéndose retrasado a marzo de 1975 por cuestiones relacionadas al calendario europeo. Nuevamente se dio la situación de que el campeón europeo rechace jugar el certamen, con lo cual el Bayern de Múnich alemán le cedió su lugar al Club Atlético de Madrid. En Avellaneda, Independiente le ganó al Atlético por 1-0 con un gol de Agustín Balbuena, pero en el Estadio Vicente Calderón cayó por 2-0 con goles de Javier Irureta y Rubén Ayala ante los españoles y se quedó sin el trofeo más codiciado.^[29]​ Tampoco se disputó la Copa Interamericana porque el campeonato de la Concacaf fue suspendido.

Al año siguiente Independiente integró su grupo en la segunda fase de la Copa Libertadores 1975 junto a Rosario Central y Cruzeiro. Independiente comenzó la ronda perdiendo sus primeros dos partidos, quedando casi eliminado a falta de dos fechas. En la tercera fecha le ganó a Central por 2-0 pero la clasificación dependía de un milagro, ya que necesitaba que Cruzeiro pierda ante Central y luego ganarle al equipo brazuca en la última fecha. Eso fue precisamente lo que ocurrió, ya que obtuvo una mano de Central, que le ganó a Cruzeiro. En última fecha necesitó hacer 3 goles para pasar a la final, y se produjo el batacazo; con goles de Pavoni de penal, Bertoni y Ruiz Moreno le quitó el primer puesto del grupo a Cruzeiro y avanzó a su cuarta final de América consecutiva. El rival en la final fue la Unión Española. El partido de ida jugado en Santiago de Chile terminó en derrota para el Rojo por 1-0, y en la vuelta triunfó por 3-1 con goles del peruano Percy Rojas, Pavoni de penal y otro de Daniel Bertoni. Cuatro días después se disputó el desempate en el Estadio Defensores del Chaco en Paraguay. Allí, triunfó Independiente por 2-0 con goles de Bertoni y Ruiz Moreno, coronándose campeón de América por sexta vez, y logró el difícil récord de ganar cuatro ediciones consecutivas.

No se definió la Copa Intercontinental de 1975 porque no se acordaron las fechas con el campeón europeo, el Bayern de Múnich. El equipo de Avellaneda disputó una copa de exhibición en Los Ángeles ante los Leones Negros de Guadalajara,^[30]​ y realizó una gira por el sudeste asiático enfrentándose a equipos de Indonesia y Hong Kong, que incluyó una participación en la Lunar New Year Cup, torneo oficial de la Asociación de Fútbol de Hong Kong. Independiente lució en esta gira una camiseta amarilla con detalles azules en lugar de su tradicional camiseta roja, por complicaciones de la televisión indonesia. La misma se siguió utilizando como indumentaria suplente por el resto de la temporada (volvió a aparecer en 2014 como edición limitada).^[31]​

En la Copa Libertadores 1976, luego de cinco años, cayó en segunda fase. Tanto River Plate como el Rojo terminaron empatados por puntos en el grupo y debieron disputar un partido desempate para determinar el finalista, y fue River quien salió victorioso, por la mínima. Lo más resaltable de este certamen fue que en el partido contra Peñarol en cancha del Rojo, Ricardo Bochini anotó el que muchos consideran como "el mejor gol de la historia de Independiente"; arrancó desde el sector derecho de la mitad de la cancha, "tiró una pared" con Rubén Galván, eludió a siete jugadores uruguayos (a uno de ellos, dos veces), un par de ellos terminaron desplomados en el pasto por el amague y, ya mano a mano con el arquero rival, hizo una breve pausa, acarició la pelota con la cara interna de su botín derecho y definió con un sutil pase a la red lateral izquierda del arquero.^[32]​

En su tercera participación consecutiva en la Copa Interamericana enfrentó al Atlético Español de México, hoy refundado como Club Necaxa. Tanto la ida como la vuelta se jugaron en el Estadio Olímpico de la UCV en Venezuela, donde en primera instancia igualaron 2-2, con goles de Ricardo Bochini y Víctor Hugo Arroyo para el Rojo. En el partido de desquite igualaron 0-0 y definieron la copa por penales, que finalmente fue levantada por Independiente luego del penal convertido por Víctor Hugo Arroyo.

En 1977 no levantó trofeos internacionales, pero la racha ganadora continuó en el plano local, coronándose campeón del Nacional 1977. En este torneo venció en el partido definitorio a Talleres de Córdoba, en una final que es recordada como la más hazaña más grande de Independiente, ya que el equipo cordobés, que estaba definiendo la final en su estadio, se puso al frente por 2-1 con dos goles ilegítimos, y fue beneficiado por un árbitro que expulsó por protestar a tres jugadores de Independiente, pero los de Avellaneda llegaron al empate y al título con un gol de Ricardo Bochini, en una combinación con Daniel Bertoni y Mariano Biondi. El entrenador José Pastoriza quedó inmortalizado con una frase que le dijo a sus jugadores luego de las tres injustas expulsiones: "Vayan, sean hombres, jueguen y ganen".^[33]​

En 1978, los futbolistas rojos Daniel Bertoni, Rubén Galván, Omar Larrosa y Rubén Pagnanini fueron campeones de la Copa Mundial de Fútbol de 1978, dirigidos por César Luis Menotti. Bertoni fue el único titular en la final contra Holanda (marcó el gol definitivo en el alargue), mientras que Larrosa ingresó en el segundo tiempo.^[34]​

Ese año siguiente volvió a ganar el mismo certamen local, el Nacional 1978, venciendo a Talleres en semifinales, y en la final al equipo "millonario", River Plate. Con River mpató 0-0 en el Monumental, y obtuvo un triunfo por 2-0 en Avellaneda con dos goles de Ricardo Bochini, para consagrarse como campeón del país campeón del mundo. El goleador rojo fue Norberto Outes, con 14 goles. Este fue el último título de una racha de nueve años consecutivos saliendo campeón.

En 1983 obtuvo su 11.º título de Primera División. Casi como una costumbre, Independiente salió campeón viviendo un hecho único y anecdótico en la historia del club y también del fútbol argentino; el equipo rojo, que estaba primero con diferencia de un punto con respecto a San Lorenzo y Ferro Carril Oeste, jugó el último partido del campeonato contra su clásico rival Racing Club, que había descendido en la fecha anterior. Dicho partido lo ganó 2-0, y de esta manera se consagró campeón dándose el gusto de dar la vuelta olímpica en el estadio de su eterno rival, que descendía a la "B" por primera vez. La figura de Independiente fue Jorge Burruchaga anotando 15 goles a lo largo del torneo.

El título de campeón de Primera le dio la clasificación a la Libertadores. Superó la fase de grupos posicionándose primero luego de vencer en la anteúltima fecha al Club Olimpia de Paraguay, en un grupo también conformado por Estudiantes de La Plata y Sportivo Luqueño. El buen nivel demostrado continuó en la fase semifinal de grupos, donde compartió el suyo con Nacional y la Universidad Católica de Chile, alcanzó nuevamente la final de la Copa Libertadores ganándole a Nacional en su última fecha. En la final salió al campo de juego frente a Grêmio, el campeón defensor. Con un gol de Jorge Burruchaga resultó victorioso en el partido de ida en Porto Alegre. Tras empatar el segundo partido en Avellaneda, gritó por séptima vez campeón de América.

La Copa Intercontinental 1984 se jugó en un complicado contexto político; se enfrentó al Liverpool inglés en una final dos años después de la caída de Argentina ante Gran Bretaña en la Guerra de Malvinas, uno de los episodios más tristes de la historia argentina. El Rojo contó con el apoyo de toda la población argentina en su partido contra el campeón europeo. Con una asistencia de 62.000 espectadores, Independiente se adelantó en el marcador al sexto minuto de iniciado el partido con gol de José Percudani. Tras el gol, el entrenador de Independiente José Pastoriza ordenó a sus jugadores bajar la intensidad del mediocampo a la defensa, invitando al Liverpool a atacarlos. Su plan resultó exitoso, ya que aunque el club inglés tuvo el mayor porcentaje de posesión de balón, no consiguió anotar. Independiente siempre se mantuvo firme en la última línea compuesta por Néstor Clausen, Hugo Villaverde, Enzo Trossero y Carlos Enrique, y el partido finalizó con triunfo 1-0 para Independiente, en el Estadio Olímpico de Tokio en Japón, resultando campeón del mundo por segunda vez.

En la edición 1985 de la Copa Libertadores debutó en la segunda fase como campeón defensor. En dicha instancia el grupo que integró lo conformó junto a Argentinos Juniors y Blooming, con el dato de que por primera vez se enfrentaba a un equipo boliviano. En la última fecha se jugó en Avellaneda el acceso a la final contra Argentinos Juniors y perdió por 1-2 con el Bicho, la sorpresa del torneo. Hacia el minuto 25 los Bichos Colorados iban ganando 0-2, y aunque antes del final del primer tiempo logró descontar José Percudani, esta vez fue Independiente el que no pudo alcanzar el empate y quedó afuera de la copa, tirando abajo la chance de llegar rápidamente al octavo título.

En 1986, los futbolistas rojos Ricardo Bochini, Néstor Clausen y Ricardo Giusti fueron campeones de la Copa Mundial de Fútbol de 1986, dirigidos por Carlos Bilardo. Giusti fue el único titular en la final contra Alemania, mientras que Jorge Burruchaga (recientemente transferido) marcó el gol definitivo, siendo asistido por Maradona.^[35]​ Aquel Mundial contó con la participación de Bochini durante un puñado de minutos en las semifinales contra Bélgica. El "Bocha" ingresó en el minuto 84' del partido, y Maradona, que había marcado los dos goles del partido, se acercó a Bochini con una frase para el recuerdo; "Pase Maestro, lo estábamos esperando".^[36]​ Bochini fue el ídolo máximo de Maradona en su juventud, y en ese entonces se dio el gusto de jugar con su "maestro" por primera vez.^[37]​

El Rojo entró a la Copa Libertadores 1987 ganando la Liguilla Pre-Libertadores, luego de superar en la final a Boca en La Bombonera por 2-1, con un gol en propia puerta y otro de Bochini.^[38]​ Superó su grupo de la primera fase, que incluía a Rosario Central, Deportivo Táchira y Estudiantes de Mérida. En segunda fase terminó debajo de Peñarol y River Plate en su grupo. Una victoria en Avellaneda ante Peñarol en la penúltima fecha lo hubiese colocado en su octava final, pero perdió y dejó pasar otra chance de llegar a una octava final.

En 1989, los Rojos se coronaron campeones de Primera División. En el ámbito internacional, alcanzaron la final de la Supercopa Sudamericana 1989, certamen que reunía a todos los campeones de la Copa Libertadores. Independiente eliminó consecutivamente al Santos de Brasil, a un Atlético Nacional que venía de ganar la Libertadores y en semifinales a Argentinos Juniors. La final se la disputó contra Boca Juniors empatando en cero los dos partidos, situación que se desempató mediante una definición por penales que dio como ganador al xeneize, perdiendo por primera vez la final de un torneo sudamericano.

En 1991 se retiró Ricardo Bochini. Convertido para muchos en el máximo ídolo de la historia del club, jugó los 19 años de su carrera profesional en Independiente, desde 1972 hasta 1991, ganando 8 títulos internacionales y 4 campeonatos argentinos.

En 1993 los rojos vivieron un memorable 3-1 a Newell's Old Boys por el Torneo Apertura 1993, partido que significó el regreso de Diego Maradona al fútbol argentino, luego de su carrera por Europa. Esta fue la única vez que Independiente le ganó a un equipo de Maradona luego de que el Diez ganara la Copa del Mundo con Argentina. El propio Maradona reconoció emocionado ese día, en una entrevista televisiva, haber estado entre los hinchas de Independiente.^[39]​

En 1994, Independiente ganó el Torneo Clausura bajo la dirección técnica de Miguel Ángel Brindisi luego de golear en la última fecha a Huracán por 4-0, quien venía siendo el puntero del campeonato. El campeonato finalizó en el mes de mayo por la realización del Mundial 1994. El Rojo acabó teniendo tanto el mejor ataque del campeonato como la mejor defensa, con 32 goles a favor y sólo 13 en contra respectivamente.

En la Supercopa Sudamericana 1994 eliminó al Santos en octavos goléandolo por 4-0, luego de perder la ida. En los duelos de cuartos empató con Grêmio en Porto Alegre y venció por 2-0 en Avellaneda, para luego eliminar en semifinales por tercera vez consecutiva a otro grande del fútbol brasileño, el Cruzeiro, cayendo primero en Belo Horizonte y goleando por 4-0 en la vuelta con el "Palomo" Albeiro Usuriaga como figura. En la final llegó una revancha contra Boca luego de la final perdida de 1989. Los xeneizes empezaron ganando en la Bombonera, pero dos goles de Sebastián Rambert, uno para sellar el empate, y otro para triunfar en el partido de vuelta, le alcanzaron para levantar la copa por primera vez. "Pascualito" Rambert culminó el torneo como goleador.

El título lo llevó a disputar la Recopa Sudamericana 1995 en el Estadio Olímpico de Tokio (sede donde ganó la Intercontinental 1984) contra el campeón de la Copa Libertadores 1994, el Vélez Sarsfield dirigido por Carlos Bianchi. Independiente dio la sorpresa y ganó con un gol de Juan José Serrizuela tras un centro buscapiés de Claudio Arzeno en el inicio del segundo tiempo, donde nada pudo hacer el arquero José Luis Chilavert. Fue el segundo título que ganó Independiente en el Estadio Olímpico de Tokio. El Rojo aprovechó la gira y jugó amistosos con el Urawa Red Diamonds y el Sanfrecce Hiroshima.[7]

En la Supercopa Sudamericana 1995 empató con el Santos tanto en Argentina como en Brasil, triunfando en los penales como visitante. La clasificación corrió riesgo en cuartos cuando perdió con Atlético Nacional en el Estadio Atanasio Girardot pero jugando en casa lo dio vuelta con dos goles de Gustavo López y avanzó a semifinales. El difícil River Plate de Enzo Francescoli comenzó triunfando 0-2 en Avellaneda pero el Rojo alcanzó el empate con goles de Javier Mazzoni, y luego se dio el lujo de eliminar a River en el Estadio Monumental en la definición por penales, donde relució el arquero Faryd Mondragón, que ya había tapado un penal en octavos contra Santos. En la final jugó contra el Flamengo; ganó 2-0 en la ida, con goles de la Chancha Mazzoni y Cristian Domizi. En el partido de vuelta, en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro, perdió 1-0 con un tanto de Romário, el Balón de Oro de la última Copa del Mundo. Pero por diferencia de gol logró el bicampeonato ante un intimidante público de casi 90.000 espectadores.

En otro viaje a Japón, al año siguiente, los Rojos jugaron la Recopa Sudamericana 1996 contra Grêmio, a partido único en el Estadio Conmemorativo de la Universiada de la ciudad de Kōbe, Japón. En esta ocasión, no le pudo hacer frente el último campeón de la Copa Libertadores y fue goleado 4-1. Los brasileños se pusieron arriba temprano en el marcador a lo cual Independiente consiguió igualar rápidamente a través de Jorge Burruchaga, pero realizó un mal segundo tiempo y se llevó tres goles más.

Desde el título en el Maracaná, Independiente cayó en declive. De allí en más comenzó a atravesar malas y regulares campañas en los torneos de Primera División, destacándose únicamente un subcampeonato en el Torneo Clausura 2000 y el campeonato del Torneo Apertura 2002, el último campeonato de liga ganado por Independiente hoy en día.

En 1999, Independiente fue incluido por primera vez en un videojuego de fútbol, el FIFA 2000. Bajo el nombre de "Inde 72-75" fue incluido entre los "equipos clásicos", un modo de juego nuevo que trajo a la escena a los mejores equipos de la historia. Junto con Boca (1976) son los dos primeros clubes argentinos en ser jugables en la historia de los videojuegos, y junto al Santos (1962-1963) son los únicos clubes sudamericanos de la mencionada categoría. Está disponible para Microsoft Windows, PlayStation y Game Boy Color.^[40]​

Entre 1998 y 2001 participó en todas las ediciones de la Copa Mercosur, torneo oficial que reemplazó a la Supercopa, apenas llegando a cuartos de final en la mejor de las participaciones.^[41]​

En 2002, tras la venta de Diego Forlán al Manchester United, se quedó con un plantel diezmado y anotó sólo 14 goles en los 19 partidos del Torneo Clausura 2002, terminando por primera vez en última posición (20.º) y comprometiéndose con el descenso. Quedó a sólo dos puntos de la zona de promoción (repechaje).

En ese contexto, Independiente necesitó realizar prácticamente una campaña de campeón para escaparse del descenso, y se coronó campeón del Torneo Apertura 2002 luego de haber pelado durante todo el certamen con Boca. El Rojo, entrenado por Américo Gallego, tenía un plantel integrado entre otras figuras por Gabriel Milito, Federico Insúa, Daniel Montenegro y Andrés Silvera, siendo este último el goleador del campeonato con 16 goles. Ese campeonato es muy recordado por el buen juego del equipo, resultando la delantera más goleadora y la segunda defensa menos vencida. Un gol de Lucas Pusineri contra Boca casi sobre la hora, en la penúltima fecha, fue el más decisivo de todos para terminar consagrarse en la última fecha con goleada 3-0 sobre San Lorenzo en el estadio Nuevo Gasómetro, donde el Rojo levantó el trofeo. Andrés Silvera fue el goleador del torneo, metiendo muchos goles claves para los Diablos Rojos.

En 2002 comenzaron a hacerse de público conocimiento problemas de endeudamiento en Independiente, que derivaron en malos rendimientos en el plano deportivo y crisis institucionales, con dirigentes teniendo problemas para finalizar sus mandatos en buenos términos.^[42]​ En Primera División, durante los años siguientes, estuvo con frecuencia entre los puestos bajos de la tabla, sin poder clasificar a la Copa Libertadores ni a la Copa Sudamericana.

Previo a comenzar el Torneo Apertura 2004 falleció José Pastoriza, entrenador del equipo en aquel momento, y hombre que dirigió al equipo a ganar la Libertadores y la Intercontinental de 1984 también como técnico, y campeón también de la Libertadores 1972 como jugador, entre otros títulos.^[43]​ Su último partido al frente de Independiente fue en la victoria por 2-1 ante Nueva Chicago por el Torneo Clausura en Avellaneda.^[44]​

En 2003 debutó oficialmente el jugador Sergio Agüero con apenas 15 años, el debutante más joven en la historia del fútbol argentino. Marcó 23 goles en 54 partidos (entre ellos, un inolvidable gol "maradoniano" a Racing en 2005 arrancando desde mitad de cancha y gambeteando varios rivales)^[45]​ y fue transferido en 2006 al Club Atlético de Madrid por una cifra récord de $28,7 millones de dólares teniendo 18 años, cifra que lo posicionó por mucho tiempo como la venta más grande del fútbol argentino. Tiempo después se realizó la venta de Oscar Ustari al Getafe en aproximadamente 10 millones de dólares, siendo la venta más grande de un arquero del fútbol argentino, y en 2008 fue transferido Germán Denis al Nápoli por 7 millones de euros.^[46]​

Estas ventas sirvieron para sanear la economía del club, e incluso, el presidente Julio Comparada anunció la construcción del Estadio Libertadores de América, de infraestructura moderna y planeado para 50.000 espectadores. Durante dos años y medio, mientras se levantaba el estadio, Independiente ejerció como local en los estadios Tomás Adolfo Ducó de Huracán, el Estadio Ciudad de Lanús y el Estadio Presidente Perón de Racing. Curiosamente, mientras oficiaba de local en el estadio de Huracán, Independiente volvió a ser local en su ciudad de origen 102 años después de mudarse a Avellaneda en 1907.^[47]​

En 2009, al juvenil arquero de Independiente, Emiliano Martínez alias Dibu, pasó al Arsenal inglés, y el tiempo lo puso en lo más alto del fútbol llegando a ser campeón del mundo y figura con Argentina en Catar 2022.^[48]​

En 2010 el equipo realizó un buen Torneo Clausura 2010 con chances de haber sido campeón, pero se estancó a mediados del torneo y el campeón fue Argentinos Juniors. En la segunda mitad del año, mientras terminaba en la última posición del Torneo Apertura, protagonizaba una gran campaña en una copa internacional.

Se trató de la Copa Sudamericana 2010, donde Independiente eliminó a Argentinos en primera fase, a Defensor Sporting en octavos de final, y al Deportes Tolima en cuartos a través con la regla del gol de visitante. Luego en semifinales parecía que la ilusión se acababa cuando arrancó perdiendo 3-0 con la Liga de Quito en tierras ecuatorianas, pero a través de Lucas Mareque y Andrés Silvera acabó el encuentro con un 3-2 que en un Estadio Libertadores repleto se encargó de remontar por 2-1, con goles de Facundo Parra y Hernán Fredes.

En la final del certamen le tocó enfrentarse al Goiás, que se encontraba en una situación parecida; jugó la final habiendo descendido a la Serie B brasileña, algo inédito en la historia del fútbol sudamericano. En la copa venía de eliminar al Palmeiras en semifinales. Los brasileños vencieron 2-0 en el Estadio Serra Dourada, lo que desencadenó una emocionante final donde en la vuelta Independiente venció 3-1 con un gol de Julián Velázquez y dos de Facundo Parra, que los llevó a los penales pasando por un sufrido alargue donde Goiás tuvo un gol anulado por una leve posición adelantada y un tiro en el palo. Después, todos los penales de Independiente fueron convertidos, siendo el último de Eduardo Tuzzio que le dio a Independiente su 16.º copa internacional y alcanzando "La otra mitad de la gloria".

Este logro, en parte, fue un detonante para que Independiente volviera a incursionar en una crisis deportiva, ya que venía de terminar último en el torneo argentino. Durante 2011 quedó eliminado muy tempranamente de la Copa Libertadores 2011 y la Copa Sudamericana 2011, y perdió las finales de la Copa Suruga Bank 2011 y la Recopa Sudamericana 2011. En el torneo local no logró escaparle al descenso, comenzando el 2012 comprometido con el mismo. Tanto en el Torneo Clausura 2012 como en el Torneo Inicial 2012 volvió a finalizar entre los últimos, desencadenando en el primer descenso en la historia del club tras el Torneo Final 2013.

El partido que condenó a Independiente al descenso, luego de 101 años de participación consecutiva en Primera, fue una derrota por 0-1 ante San Lorenzo (gol de Ángel Correa) en la penúltima fecha en el Estadio Libertadores de América, siendo el episodio más triste en la historia del club. Muy lamentado por los jugadores a los que les tocó descender y por la hinchada de Independiente, que fue muy elogiada por el público general por permanecer cantando y alentando de forma apasionante. El último partido, ya descendido, lo jugó con Colón empatando 1-1.^[49]​

El Rojo, en línea con su situación deportiva, estuvo ahogado en una terrible crisis institucional, con deudas, inhibiciones y pedidos de quiebra. Una semana después del descenso, una asamblea dirigencial en la sede social del club fue brutalmente interrumpida por un ataque de sillazos al presidente Javier Cantero.^[50]​ El Rojo debutó en el torneo de la Primera B Nacional 2013-14 con una derrota por 1-2 en su propia cancha ante Brown de Adrogué, equipo recién ascendido desde tercera división. Estuvo cuatro fechas más sin conocer la victoria, quedando relegado en zona de descenso a la Primera B Metropolitana.

Con la contratación de Omar De Felippe como director técnico en la quinta fecha y el regreso de tres jugadores muy queridos como Daniel Montenegro, Federico Insúa (campeones en 2002) y Facundo Parra (campeón en 2010), los resultados cambiaron para mejor e Independiente logró su primera victoria en la sexta fecha, por 1-0 ante Huracán en los últimos minutos del partido. A partir de allí el Rojo entró en una senda de victorias y terminó el primer semestre en puestos de ascenso. Incluso, el arquero Diego Rodríguez logró el récord histórico de valla invicta de la Primera B Nacional.^[51]​ El segundo semestre del torneo comenzó con una recha negativa de ocho partidos sin ganar que alejó a Independiente del ascenso, y desencadenó un nuevo clima de crisis, manifestaciones de hinchas contra los dirigentes, y finalmente la renuncia del presidente Cantero, quedando su cargo en manos de un interinato.^[52]​ Un conocido juicio millonario a Independiente llegó en marzo de 2014, donde le fueron embargadas sus tan queridas copas internacionales.^[53]​ Fue con la aparición de Sebastián Penco y goles importantes de parte suya que Independiente se renovó y alcanzó el cuarto lugar del campeonato. Independiente se fue insultado por su gente en la última fecha y, empatado en puntos con Huracán, debió disputar un partido desempate por el último ascenso.^[54]​ Con goles de Martín Zapata y Francisco Pizzini, venció al "Globo" en el Estadio Ciudad de La Plata y regresó a Primera División.

De regreso en la máxima categoría, asumió como presidente el sindicalista Hugo Moyano, secretario general de la CGT argentina y expresidente del Partido Justicialista. La gestión de Moyano, en sus comienzos, sacó a Independiente de sus problemas de endeudamiento, realizó una renovación infraestructural total en el Estadio Libertadores de América, los predios de entrenamiento y la sede social del club, que se encontraban en un estado de abandono y casi precarizados.^[55]​ Los exjugadores del club Sergio Agüero y Gabriel Milito financiaron en 2014 la construcción de un centro de entrenamiento modernizado y novedoso. El propio Milito se hizo cargo de la dirección técnica del club en 2016, permaneciendo en el cargo sólo seis meses pero sentando las bases de un equipo en formación.^[56]​

Deportivamente, y ahora con Jorge Almirón como director técnico, hizo su reestreno en Primera División goleando por 3-0 a Atlético de Rafaela, y en la quinta fecha ganó el primer Cl��sico de Avellaneda post-ascenso por 2-1. La rivalidad entre ambos había escalado fuertemente con el descenso del Rojo, con los hinchas "académicos" burlándose a diestra y siniestra. En respuesta, se hizo sentir en el estadio la canción "Un año de culo sano", en referencia a la paternidad sobre la "Academia" en el clásico.^[57]​ En ese torneo alcanzó la cuarta posición, un resultado que lo clasificó a la Copa Sudamericana 2015 apenas seis meses después de haber ascendido.^[58]​

En 2016, ante la ausencia de Lionel Messi, el defensor diablo Víctor Cuesta fue simultáneamente capitán de Independiente y de la Selección Argentina.^[59]​

En 2017, con la contratación de Ariel Holan como técnico, Independiente hizo una gran campaña en la Copa Sudamericana 2017 eliminando en fases iniciales a Alianza Lima y Deportes Iquique. En octavos de final se enfrentó a un Atlético Tucumán que venció al Rojo en el norte argentino por 1-0, resultado que en el Estadio Libertadores remontó por 2-0. Con el correr del segundo tiempo estuvo al borde de la eliminación cuando el árbitro sancionó un penal ilegítimo para el Decano, que Martín Campaña se encargó de atajarlo. En cuartos de final ganó con un global de 6-1 a un Nacional de Paraguay que venía de eliminar a Cruzeiro, Olimpia y Estudiantes. En semifinales protagonizó un duelo contra Libertad de Paraguay, equipo que triunfó en la ida con un polémico gol de Óscar Cardozo que utilizó el antebrazo para bajar un centro y concretar el gol, segundos después de apenas empezado el partido. En el partido de vuelta se encargaron de poner arriba a Independiente en la serie Esequiel Barco mediante un penal, y Gigliotti con dos goles.

En la final tuvo como rival al Flamengo brasileño. El equipo carioca le dio un golpe a Independiente adelantándose a los ocho minutos del primer partido con un gol de cabeza de Réver, pero con el correr del encuentro Emmanuel Gigliotti y Maxi Meza cerraron la ida en 2-1 y definieron la final en el Estadio Maracaná de Río de Janeiro con ventaja. Allí, el Mengao alcanzó a empatar la serie mediante Paquetá pero un penal contra Meza, que Barco cambió por gol, selló la vuelta en 1-1 y consagró a Independiente campeón de su segunda Copa Sudamericana en el Maracaná, como en 1995. Igualó a Boca como los únicos equipos con dos títulos de este trofeo.

A raíz de sus grandes actuaciones en la Copa Sudamericana, Esequiel Barco fue transferido al Atlanta United de la Major League Soccer en $15 millones de dólares, siendo esta la transferencia más alta en la historia de la MLS.^[60]​ Nicolás Tagliafico, capitán en la Sudamericana y considerado en la Selección Argentina, pasó por $6,5 millones de dólares al Ajax de Ámsterdam.^[61]​

Con estas dos bajas sensibles, y jugando casi la totalidad de los dos partidos con un hombre menos por dos polémicas expulsiones ordenadas por el VAR, Independiente perdió la Recopa Sudamericana 2018 por penales contra Grêmio, los vigentes campeones de América. A mitad de año, el Rojo se presentó por quinta vez en su historia en Japón para disputar la Copa Suruga Bank 2018, contra el Cerezo Osaka japonés. El partido se jugó el 8 de agosto en el Estadio Yanmar Nagai de Osaka e Independiente se consagró tras imponerse por 1-0, con un gol de Silvio Romero. Con la obtención de este torneo, la institución sumó su 18° título internacional de carácter confederativo e interconfederativo, volviendo a posicionarse en el primer lugar como "Rey de Copas" de América junto a Boca, pero ya no del mundo, ya que al momento Real Madrid, Al Ahly y el F.C. Barcelona se encontraban arriba.^[62]​

Independiente llegó a los cuartos de final de la Copa Libertadores 2018 y fue eliminado por River Plate de manera escandalosa, ya que el VAR no le concedió un claro penal por una falta de expulsión de Javier Pinola contra Martín Benítez, que de ser consagrado en gol lo hubiese prácticamente depositado en semifinales.^[63]​

Por la fecha 19 de la Superliga Argentina 2019-20, Independiente se enfrentó a Gimnasia La Plata contando con la especial visita de Diego Maradona, director técnico del "Lobo". El partido lo ganó Gimnasia, pero el "Diez" recibió un homenaje del club con la presencia de Ricardo Bochini, Ricardo Pavoni, Daniel Bertoni y Miguel Ángel Santoro, ídolos de Maradona en su juventud. Maradona recordó al "Negro" Rubén Galván, al memorable equipo de Independiente de los años setenta, le dedicó unas palabras a su máximo ídolo Bochini y pidió que el estadio de Independiente pase a llamarse "Ricardo Enrique Bochini". La dirigencia lo escuchó y en 2021, con el fallecimiento de Maradona, la casa del Rojo pasó a llamarse oficialmente "Estadio Libertadores de América - Ricardo Enrique Bochini".^[64]​

A fines de 2019, el Rojo volvió a incursionar en problemas institucionales, endeudamiento y juicios. Motivados por el éxito en la Copa Sudamericana, ^[65]​ el club realizó grandes inversiones en su plantilla profesional, con la compra más cara de su historia; Fernando Gaibor por algo más de $4 millones de dólares en 2018,^[66]​ récord que volvió a romper en 2019 con la contratación de Cecilio Domínguez por $6,2 millones de dólares,^[67]​ y otros jugadores con salarios altos. Los resultados deportivos fueron malos, Holan presentó su renuncia^[68]​ y el club contrajo meses de sueldo sin depositar y los jugadores Gaibor, Campaña, Silva, Sánchez Miño y Verón se declararon libres del club iniciándole juicios millonarios a Independiente por sumas que se tornaron impagables, complicadas también por la gravísima depreciación del peso argentino con respecto al dólar estadounidense durante los gobiernos de Mauricio Macri y Alberto Fernández, y la pandemia del COVID-19 que afectó las recaudaciones.^[69]​

Frente a esta situación, el club se desprendió de los futbolistas de mayor contrato, ya sea dejándolos expirar, o mediante ventas a precio muy bajo, como los casos de Fabricio Bustos (dos veces campeón y jugador de la selección argentina) por apenas $450 mil dólares al Inter de Brasil,^[70]​ o Cecilio Domínguez, que habiendo llegado por la mencionada cifra record de $6,2 millones, pasó por apenas $1,7 millones al Austin FC.^[71]​ En muy poco tiempo, el plantel que llegó a ser el segundo más caro de Argentina, se devaluó en casi $100 millones de dólares,^[72]​ pasando a estar integrado casi en su totalidad por juveniles.

En 2021 debían realizarse las elecciones a presidente de la institución, sin embargo la justicia nacional decidió suspenderlas y postergarlas debido a que la agrupación Unidad Independiente, liderada por el periodista Fabián Doman y Néstor Grindetti, el entonces intendente de Lanús, no fue autorizada a competir en la mismas por la autoridad del club.^[73]​ Luego de un año de postergación, la mencionada lista opositora logró imponerse en los comicios con el 72% de los votos, frente a un 13% del candidato de los Moyano.^[74]​ Apenas unos meses después de asumir, en 2023, y ante semejante crisis, el presidente Doman tomó la polémica decisión de renunciar a su cargo, quedando Grindetti como máximo responsable. El equipo, en medio de la crisis, y sin haber logrado clasificar a ningún torneo internacional por primera vez en nueve años, afrontó la renuncia de su director técnico estando penúltimo en el torneo y encaminado al descenso.

Imposibilitado de pagar su deuda millonaria, que ascendía a más de 22 millones de dólares,^[75]​ la economía del club fue rescatada gracias a una colecta realizada por el influencer Santi Maratea a través de la billetera digital Mercado Pago, de la cual participaron aportantes no sólo de Argentina sino también de diferentes partes del mundo, incluso participando hinchas y exjugadores de clubes rivales como Racing, River y Boca.^[76]​ El dinero recaudado se utilizó para cancelar las deudas de mayor riesgo, como la reclamada por el América de México de más de $5 millones de dólares, con la cual había intervenido la FIFA para inhibir a Independiente de comprar jugadores.

Tras la colecta y el levantamiento de las inhibiciones, el equipo salió rápidamente del fondo de la tabla con la contratación del ídolo xeneize Carlos Tévez como director técnico, que por las dificultades del club tuvo un muy reconocido gesto de aceptar dirigir sin cobrar un sueldo.^[77]​ El equipo terminó la temporada cerca de la clasificación a los play-offs de la Copa de la Liga Profesional 2023, logrando su principal objetivo de evadir el descenso e incluso logrando una victoria de 2-0 en el clásico ante Racing jugando en el Cilindro.^[78]​

Con los títulos detallados a continuación, Independiente se posiciona como uno de los dos clubes sudamericanos con más títulos internacionales, y sexto a nivel mundial. Es el tercero más ganador del campeonato argentino de Primera División.

Es el máximo ganador de la Copa Libertadores de América teniendo 7 títulos de dicha competencia, y de la Copa Interamericana, con 3 títulos consecutivos. También tiene el récord compartido de ser el que más títulos posee en la Supercopa y Copa Sudamericana con dos en cada competencia, junto a Cruzeiro y Boca Juniors respectivamente. Además ganó una Recopa.

Como máximos logros obtuvo en dos ocasiones la Copa Intercontinental, posicionándose como mejor equipo del mundo en 1973 por haberle ganado a la Juventus en Roma y en 1984 tras vencer a Liverpool en Tokio. Oficialmente también disputó partidos en Europa, Asia y Centroamérica.

Competición	Títulos	Subcampeón
Copa Libertadores de América	7 (1964, 1965, 1972, 1973, 1974, 1975, 1984)	-
Copa Interamericana	3 (1973, 1974, 1976)	-
Copa Intercontinental	2 (1973, 1984)	4 (1964, 1965, 1972, 1974)
Supercopa Sudamericana	2 (1994, 1995)	1 (1989)
Copa Sudamericana	2 (2010, 2017)	-
Recopa Sudamericana	1 (1995)	3 (1996, 2011, 2018)
Copa Suruga Bank	1 (2018)	1 (2011)

Competición	Títulos	Subcampeón
Copa Aldao	2 (1938, 1939)	-

Competición	Títulos	Subcampeón
Primera División de Argentina	16 (1922, 1926, 1938, 1939, 1948, 1960, 1963, Nacional 1967, Metropolitano 1970, Metropolitano 1971, Nacional 1977, Nacional 1978, Metropolitano 1983, Primera División 1988/89, Clausura 1994, Apertura 2002)	16 (1912, 1923, 1932, 1934, 1935, 1937, 1940, 1954, 1964, Metropolitano 1977, Metropolitano 1982, Nacional 1983, Primera División 1989/90, Clausura 1993, Apertura 1996, Clausura 2000)
Copa de Competencia de la Asociación Amateurs	3 (1924, 1925, 1926)	-
Copa Dr. Carlos Ibarguren	2 (1938, 1939)	-
Copa de Competencia Adolfo Bullrich	2 (1909, 1917)	-
Copa de Honor	1 (1918)	1 (1916)
Copa de Competencia Jockey Club	1 (1917)	1 (1916)
Copa Adrián C. Escobar	1 (1939)	-
Copa de Competencia «La Nación»	1 (1914)	-
División Intermedia	-	1 (1911)

• "Independiente, El campeón", editorial Atlántida, escrito por Pablo Aro Geraldes y Juan Cruz Díaz.
• "Alma Roja", editorial de los Cuatro Vientos, escrito por Claudio Keblaitis.
• "El nacimiento de una pasión. Historia de los clubes de fútbol", editorial Capital Intelectual, escrito por Alejandro Fabbri.

• Club Atlético Independiente
• Anexo:Estadísticas del Club Atlético Independiente
• Anexo:Goleadores del Club Atlético Independiente
• Anexo:Instalaciones del Club Atlético Independiente
• Anexo:Entrenadores del Club Atlético Independiente

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